Directora del CEJU aconsejó a egresados evitar el éxito rápido y priorizar los valores

La Directora del Centro de Estudios Judiciales del Uruguay (CEJU), Dra. Verónica Scavone, dirigiéndose a los veinticuatro nóveles jueces que se graduaron en dicha casa de estudios, les encomendó que "no persigan el éxito rápido", que "disfruten el camino que les toca recorrer, sean solidarios, prioricen los valores y la ética antes que los cargos", porque "de buena gente se hacen las buenas instituciones". Al hacer uso de la palabra durante la ceremonia de graduación de los egresados cumplida el viernes último, y con la presencia de cuatro integrantes de la Suprema Corte de Justicia y otras autoridades del Poder Judicial, Scavone destacó la importancia del rol de los magistrados para "la construcción de una sociedad más justa y de un mejor Poder Judicial".

DISCURSO DE LA DIRECTORA DEL CEJU DRA. VERÓNICA SCAVONE

"Buenas  tardes para todas y todos:

En nombre de todo el equipo del Centro de Estudios Judiciales del Uruguay quiero darles la bienvenida.

Quiero agradecer a los Sres. Ministros de la Suprema Corte de Justicia que están hoy  acompañándonos y que han mostrado en todo momento explícito apoyo a la capacitación y a la labor de la Escuela Judicial, a las restantes autoridades del Poder Judicial,  a los integrantes de la Comisión Directiva del C.E.J.U., a los docentes, a todos los familiares y amigos de nuestros egresados de la Generación 2022/2024 que están  presencialmente y por zoom y al equipo de la Escuela Judicial,  especialmente a Daniela Ramírez que con muchísima dedicación y esmero se ha encargado de  la organización de este evento.

Este es un día importante para el CEJU y de enorme alegría, como lo es cada vez que una nueva Generación de Aspirantes cierra la etapa de Formación. Pero este año tiene la particularidad que después de muchísimo tiempo de no hacerlo, hemos decidido volver a reunirnos  para  dar cierre a esta etapa. Si bien la capacitación es un derecho y un deber que nos va a acompañar en toda nuestra vida profesional, porque el proceso de formación de los Jueces es continuo y permanente sin importar en que lugar de la organización estemos, nos parecía  que  el fin de la formación inicial no podía pasar inadvertido.

Y merece ser destacado por su significado. Este tiempo de formación marca para nuestros egresados, el comienzo de una etapa pero también el fin de un proceso que llevó mucho esfuerzo y que empezó seguramente hace mucho más de dos años.

Para nosotros como Centro de Formación,  implica el  finalizar con éxito un nuevo curso, una nueva Generación  de noveles Jueces,  a los que vemos con mucho orgullo, insertarse  en la estructura del Poder Judicial en distintas partes del país.

Pero también es un día importante para el Poder Judicial  porque  el ingreso de nuevos Jueces, que acceden a esos cargos luego de un proceso sumamente transparente, después de haber ganado un concurso de oposición y méritos y recibir dos años de exigente  capacitación teórica práctica, es motivo de destaque.

Por eso decidimos reunirnos, por eso hemos querido celebrar este día, por eso los hemos invitado a Uds. y por eso  le hemos pedido  a nuestros alumnos elijan a dos de ellos para hablar en nombre de la Generación y a dos docentes para hablar en nombre de los equipos docentes que los han acompañado en este tiempo.  

Cuando pensaba qué decirles hoy, y recorría en mi cabeza cuántas  cosas hemos hablado a lo largo de estos dos años sobre lo que es ser Juez, pensaba con mucha alegría que Uds. son un grupo de personas afortunadas,  tienen la gran suerte  de poder hacer lo que les gusta, y que esa sea su forma de ganarse la vida. Tienen la suerte de tener un trabajo vocacional.

Pero también pensaba que el haber llegado hasta aquí, claramente no era solo suerte, era y es  esfuerzo, es disciplina, es aprender del fracaso, es  estar dispuesto a sacrificarnos en muchas cosas, es sentir pasión por lo que hacemos.  Esta no es una tarea sencilla porque la esencia humana con todos sus matices y sombras está presente en los casos que se dirimen en los Juzgados.  Es una tarea que además involucra a nuestras familias, que nos interpela personalmente en muchas ocasiones, que nos da inmensas alegrías  pero nos enfrenta a desafíos. También es una labor de gran responsabilidad, porque en cualquier lugar que nos toque desempeñarla, representamos a un Poder del Estado, y de nuestros actos depende la confianza y el respeto que la ciudadanía tenga por este Poder.

Por eso requiere imprescindiblemente que se realice con convicción y vocación. Porque ser juez sin vocación, sin compromiso  mas acá o mas allá, es un drama y no sólo para quien así trabaja, sino especialmente para la comunidad en la que se trabaja.  

Para ser Juez hay que involucrarse, no hay otra manera de hacerlo.

Por eso, frente a exigencias tan altas, es que les insistimos tanto en fortalecer y generar redes, en confiar y ser confiables.

Ninguno de Uds. estaría hoy sentado aquí si no hubieran recibido en algún momento de sus vidas el apoyo de quienes están sentados acá.  Sus padres, sus parejas, sus amigos, sus abuelos, quienes hayan elegido para que hoy los acompañen seguramente sean quienes creyeron en ustedes, confiaron en ustedes y los apoyaron.

Del mismo modo que esperamos que sus compañeros de hoy, y los que se crucen a lo largo de su carrera, formen esa malla de vínculos necesaria e imprescindible que nos permite crecer como personas y profesionales.

Porque además cuando la tarea sea dura, cuando uno se pregunte por qué estoy aquí?, porque va a haber de esos días también, tener en quien confiar, les puedo asegurar va a hacer la diferencia. Y son también estos buenos compañeros de ruta,  los que  suelen aconsejarnos cuando  las lucecitas de colores nos quieren engañar.

Como les he dicho siempre, no persigan el éxito rápido,  disfruten el camino que les toca recorrer, sean solidarios, prioricen los valores y la ética antes que los cargos, que de buena gente se hacen las buenas instituciones. Y en definitiva trabajen, trabajen mucho para aportar su  granito de arena en la construcción de una sociedad más justa y de un mejor Poder Judicial,  para que cuando nos pregunten a qué nos dedicamos,  digamos con mucha humildad pero también orgullo que pertenecemos al Poder Judicial del Uruguay.

Muchos, muchos éxitos, el Ceju es y será siempre su casa".