Ministro Chediak destacó importancia del intercambio de saberes y experiencias en la Cumbre Judicial
El Ministro de la Suprema Corte de Justicia de Uruguay, Dr. Jorge Chediak, en su calidad de Secretario Permanente de la Cumbre Judicial Iberoamericana, dejó inaugurada la XIX Cumbre Judicial Iberoamericana en acto celebrado ayer en Quito y que contó con la presencia del Presidente de Ecuador, Lenín Moreno, y representantes de los órganos máximos de justicia de los 23 países que integran la mencionada organización.
Chediak describió Ecuador como un lugar "hermoso y querido" y lo llamó una "república hermana" que se organizó para desarrollar un "estupendo trabajo" a lo largo de los dos años transcurridos desde que dicho país asumió la Secretaría Protempore de la Cumbre Judicial Iberoamericana.
"Esta es una cumbre de trabajo y no de turismo judicial, que a lo largo de un cuarto de siglo ha dejado una enorme cantidad de productos" enfatizó Chediak, destacando algunos de esos productos como lo son el Código Iberoamericano de Ética Judicial o las 100 Reglas de Brasilia, e incluso el último logro, el Diccionario Jurídico Panhispánico, que pudo materializarse con el invaluable apoyo de la Real Academia Española y que se prevé presentar en el marco de la Asamblea Plenaria como ya se hizo inicialmente en la Universidad de Salamanca en el mes de diciembre con la presencia del Rey de España Felipe VI.
El orador definió la instancia como una "cumbre de trabajo que además permite intercambio de experiencias, opiniones, avances", de modo que "nos ayudamos unos a otros", compartiendo saberes para un mejor aprovechamiento de los recursos disponibles. En ese marco, Chediak mencionó la iniciativa de Ecuador para la creación de la Justicia para el combate contra el crimen organizado, como hace diez años lo hizo Uruguay emulando la beneficiosa experiencia del reino de España.
"Los tiempos modernos conspiran contra los tiempos judiciales" subrayó el Ministro de la Suprema Corte de Uruguay, añadiendo que el ciudadano ya no es tolerante, como antaño, de los tiempos que, en general, insume la gestión de los Estados, inquietud que incluso se verifica en la actividad privada. "La gente ya no es tolerante con los meses e incluso los años de demora y reclama, legítimamente, que de esa forma no se le está dando una respuesta adecuada".
"Debemos dar un servicio justo, honesto y muy célere" enfatizó Chediak, porque "es imperdonable y afecta enormemente la imagen de la Justicia que los procesos demoren, especialmente en el ámbito de la justicia penal".
"Los ciudadanos prácticamente esperan que la justicia penal sea instantánea", ironizó.
Y como conclusión señaló que "lo que se va a aprobar en la Cumbre es lo que se trabajó en los dos últimos años con el aporte de todos los operadores", a quienes felicitó y animó a seguir trabajando sobre el mismo rumbo.