Juez García procesó con prisión a cinco jóvenes parciales de Peñarol imputándoles violencia privada
17.05.15, de DICOMI-SCJ.- El Juez Letrado de Primera Instancia en lo Penal de 17º Turno, Dr. Carlos García Guaraglia, dictó el procesamiento con prisión de cinco veinteañeros, parciales del Club Atlético Peñarol, a quienes imputó un delito de violencia privada especialmente agravado.
En efecto, de la indagatoria practicada se pudo determinar que estos cinco jóvenes, quienes viajaban en un Volkswagen Gol por Estrella del Norte y Batoví, se bajaron al grito de “vamos Peñarol” e intentaron agredir a otros dos que vestían camperas del Club Nacional de Fútbol.
Los agredidos se dan a la fuga y mientras que uno de ellos logra escapar, el otro es alcanzado y golpeado varias veces con una barreta de hierro. En la corrida, según sus dichos, pierde uno de sus zapatos deportivos y se saca el otro para poder huir con más velocidad.
La Policía interviniente avista el vehículo de los agresores y los detiene. Se recupera un revólver calibre 22 que habían arrojado al patio de una finca y se incautan también un hierro de un metro de largo y un par de zapatos deportivos (tenis) pertenecientes a una de las víctimas.
Interrogado uno de los agresores sobre el motivo de su conducta, responde “me quedaron mirando y para mí hizo un gesto con la cabeza y eso ameritaba a bajarme como me bajé”.
El juez García entendió que los jóvenes concretan el ilícito “al usar amenazas y violencias para obligar a algunos a dejar de hacer alguna cosa, cual era la de transitar libremente por la vía pública vistiendo una prenda deportiva de una institución de fútbol”.
El magistrado dejó asentado que el hecho “no quedó totalmente impune merced a la pronta, oportuna y efectiva actuación de la autoridad policial” porque “de lo contrario, como muy bien señala el Ministerio Público, la reticente y/o muy poca colaboración de las víctimas, no permitió avanzar en la instrucción penal”.
Agrega que “este fenómeno, por cierto, no es nuevo, por lo contrario es muy común, es un hecho notorio que en el ‘ámbito del fútbol’ obviar, impedir y/o obstaculizar la actuación de la justicia ordinaria en los temas que los involucren”.
Los procesamientos se dispusieron con prisión por la grava alarma social que el hecho genera y porque, además, no se puede descartar que haya de recaer pena de penitenciaría.